El agudo analista Jorge Nieto Montesinos fue integrante del Partido Comunista Revolucionario Trinchera Roja en los años setenta y parte de los ochenta. Quedamos en reunirnos en el segundo piso de Café21 en Miraflores. Para hablar sobre la izquierda peruana y sobre las elecciones y sobre el libro que le hubiese gustado haber escrito. Debajo nuestro, un político de dudosa reputación conversa con un personaje desconocido para nosotros. No hacemos caso, y pasamos a concentrarnos en nuestro diálogo. Aquí les ofrezco una parte de él.

¿Tiene la izquierda alguna opción en las elecciones del 2016?
Así como está ahora, ninguna.

¿Qué debería hacer para convertirse en una opción respetable?
La izquierda tiene varios problemas. El más importante es que necesita una renovación de sus ideas. La izquierda no lo ha hecho.

¿Sus ideas son, en tu opinión, retardatarias?
Tiene un discurso, en el mejor de los casos, del siglo XX. Y ya no estamos en el siglo XX. La izquierda –aunque no quiera reconocerlo- sigue aún entrampada en que “la revolución” es la vía para el cambio. No lo dice, pero habla ahora de “la gran transformación”. No lo reconoce, pero está hablando de eso finalmente.

Bueno. De hecho, cuando le preguntas a cierta izquierda sobre Venezuela, escuchas respuestas que te desconciertan. Piensas que esta “izquierda renovada” en realidad no ha cambiado nada. Mi alusión es a Verónika Mendoza, si no quedó claro.
Para mí, fue una respuesta y un tartamudeo inaceptables. Yo empecé mi vida política, la poca vida política que he hecho, protestando en las calles contra un gobierno dictatorial. No me arrepiento de ello. Creo que estábamos en lo correcto en ese momento. Y no puedo dejar de ser solidario con los chicos que protestan contra el gobierno autoritario de Venezuela. Leopoldo López aquí sería (catalogado como parte) de la derecha bruta y achorada, pero merece estar en libertad peleando por las ideas que tiene.

Te preguntaba sobre qué debería hacer la izquierda para convertirse en una opción decente y respetable...
Primero, renovar ideas. Abrazar la democracia a plenitud, sin cortapisas. Sin fisuras. La democracia es un horizonte utópico, no es una táctica. Y tiene que resolver su relación con la inversión privada. La izquierda peruana está perpetuamente peleada con la inversión privada.

Ese tema es medular. Una izquierda que no está a favor de la inversión, es una izquierda en la que desconfías.
La relación de la izquierda con el mercado es permanentemente conflictiva. Yo sé que un buen empresario tiene que aspirar a ser un empresario monopólico, pero un buen político y un buen Estado debe impedírselo; de modo que la competencia siga desarrollando las virtudes que tiene. ¿Qué significa eso en concreto? En estos momentos lo que tienes que pedir no es menor mercado, sino que debes pedir más mercado. En vez de pedir menos competencia, debes pedir más competencia. Sí debes reconstruir la esfera de lo público. Requieres de un Estado que de verdad genere las condiciones de competencia. Que el empresario de Gamarra acceda a créditos como todos los demás. Que no tenga que estar pagándole “peaje” a nadie para entrar al mercado para competir. Ese problema debería ser incorporado en una propuesta económica de la izquierda. Pero siento que la izquierda tiene muy pocas ideas nuevas.

¿Qué cuadros políticos de la izquierda te parece que se han quedado congelados en el siglo XX?
Tú quieres hacer que me pelee con mis amigos…

Bueno. No con todos tus amigos...
Se les ve aparecer en los sets de televisión…

¿Verónika Mendoza es de la izquierda del siglo XX o del siglo XXI?
Algunos amigos míos han escrito que lo que requiere la izquierda son rostros nuevos. Y con rostros nuevos creen que han resuelto el problema. El problema es que si los rostros nuevos vienen con las mismas viejas ideas, estamos en lo mismo.

Ahora, no todos o todas mantienen los viejos discursos, ¿no? Susana Villarán, por ejemplo, me parece una mujer que encarna a la izquierda moderna y progresista, ¿no te parece?
Acaba de pronunciarse a favor de la libertad de Leopoldo López. Me parece muy bien. El problema con Susana es que carga el pasivo de su gestión en la Municipalidad de Lima. Hay gente en la izquierda que trata de renovar el discurso de la izquierda. Tenemos una izquierda a veces ecologista, indigenista, a veces verde, pero la lucha contra la desigualdad, por ejemplo, está en boca de muy pocos. Y el país necesita una izquierda fuerte y moderna. La necesita para equilibrarlo. Está muy cargado hacia la derecha.

Ese es claramente el escenario del 2016: una proliferación de candidaturas de derecha…
Es un problema para el país. Es indispensable que exista una izquierda moderna, con capacidad de actuar en la política peruana. Es indispensable para reequilibrar el país.

¿Qué ha sido lo peor de este gobierno?
La mentira.

¿Quién gana en el 2016? ¿Keiko? ¿Alan? ¿PPK? ¿Toledo?
De esas cuatro candidaturas que mencionas, Keiko tiene una enorme ventaja por lo siguiente: si miras su opción de voto, es una opción de voto que está distribuida en los sectores A, B, C, D y E, en los que los bolsones de C, D y E son muy importantes para su 33 o 34%. Todos los demás candidatos son de A y B. La mejor prueba es que el APRA de Alan de García es un partido de derecha, y se ha reducido a ser un partido de A y B. Y el APRA era un partido policlasista. De modo que si me preguntas a quién veo más sólido, veo a Keiko. Ahora, la segunda opción de voto no es Pedro Pablo Kuczynski. La segunda es la que no quiere ninguna de los anteriores, que es un 30% estable.

Pero no hay nadie a la vista como para capitalizar ese 30%.
No hay nadie. Pero subrayo esto porque a todos se les olvida que hay un 30%, o hasta 31%. Me pregunto qué pasará en cuanto se acerque al momento de la elección. Está estudiado que en el Perú el 50% decide su voto en los últimos 15 días, y otros el último día.

¿Existe concentración de medios en el Perú?
Es un tema que muchos denuncian. Si muchos lo denuncian, algún problema hay.

¿Para ti es válido comprar información o pagar por una entrevista?
A mí nunca me han pagado por una entrevista. Para mí, no es válido.

¿Qué le falta al periodismo peruano?
Le falta mucho de formación, de tener una idea más completa de lo complejo que es el país. Ahora, como actividad periodística, hay muy poca investigación. Lo que hay muchas veces es periodismo de filtración, que aparece como investigación.

¿El Perú tiene futuro?
Por supuesto. No tengo ninguna duda.

¿En qué siglo?
Se nos olvida que el Perú es como México, como Guatemala, como India, como China, como Egipto. Somos un país con 10 mil años de vida humana detrás. Y ese hecho está en ti y en mí, aunque no lo notemos. Los países con ese pasado histórico no desaparecen en tres días.

¿Cuál es tu gran miedo?
Quedarme ciego de viejo y no poder leer.

Si pudieras elegir en qué o en quién reencarnarte, ¿qué o quién serías?
Jorge Nieto Montesinos. Me gustaría vivir otra vez. Tener una segunda oportunidad.

¿Qué libro te hubiera gustado haber escrito?
“Anatomía de un instante”, de Javier Cercas.

¿Cuál es tu lugar favorito en el mundo?
Aquel donde yo esté. Donde yo esté, está la vida.

¿Con quién te gustaría sentarte en una fiesta?
Eso ya ocurrió. Cuando era funcionario de la Unesco llegué tarde al festejo por el aniversario 50 de la organización, en París. Tenía un sitio asignado dentro de los funcionarios, pero llegué tarde y ya no podía ubicarme en ese sitio. Entonces me metieron a otro lugar y me sentaron a oscuras en una silla, y al poco comencé a oler un perfume delicioso. Y cuando prenden la luz en uno de los intermedios de la actividad, discretamente volteo… y estaba sentado al lado de Catherine Deneuve, quien era embajadora de buena voluntad de la Unesco.

¿Qué consejo le darías al presidente Ollanta Humala?
Que sea presidente. Que deje de pensarse como esposo. Que se convierta en un hombre de Estado.

¿Qué estás leyendo en este momento?
La novela de Renato Cisneros. “La distancia que nos separa”.

¿En qué profesión no te hallarías nunca?
Comerciante. No sé vender.

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Foto de cabecera: Raúl García / LaMula.pe